Por lo general, cuando se suele hablar de los iPhone de Apple lo cierto es que suele estar todo relacionado con dispositivos geniales y que arrasan en el mercado. Y es que, desde hace algunos años suele ser una realidad y, según las cifras y estadísticas, los últimos modelos de iPhone son de los teléfonos inteligentes que mejor se venden en gran cantidad de países.
Sin embargo, allá por el año 2013 sucedió algo bastante curioso. En la presentación del iPhone 5s, desde Apple aprovecharon para lanzar también el iPhone 5c, un dispositivo algo más económico que parecía que iba a arrasar en el mercado, pero que en realidad fue algo que no sucedió. De esta forma, lo cierto es que el iPhone 5c podría considerarse perfectamente como el peor iPhone de la historia, tanto por sus características como por su fracaso en lo que a ventas se refiere.
¿Por qué se dice que el iPhone 5c es el peor iPhone de la historia?
Tal y como comentábamos, allá por el año 2013, un año después de la presentación del iPhone 5, fue presentado de forma oficial el iPhone 5c. Por entonces el concepto sonaba bastante bien: un iPhone más económico, que mantenía las especificaciones del modelo anterior, un diseño con materiales más baratos y, en general, peores características que el iPhone 5s, el modelo premium del mismo. Sin embargo, toda la expectación por dicho terminal se redujo a la nada cuando los fans de Apple vieron el precio del teléfono.
Y es que, este dispositivo supuestamente económico salió a la venta en España por 599 euros en su versión de almacenamiento más básica, que encima incluía tan solo 8 GB de almacenamiento interno. Y, si bien había a quienes les atraía el tema de que existiesen multitud de colores donde escoger, el hecho de pagar ese precio por un teléfono de plástico, con el chip A6 del año pasado y encima con poca memoria de almacenamiento hicieron que este dispositivo fuese el peor iPhone de la historia de Apple.
De hecho, si seleccionabas la versión de 16 GB de almacenamiento, algo más habitual para la época, el precio se disparaba hasta los 699 euros, dinero por el que también podías escoger la versión más básica del iPhone 5s que dejaba en evidencia al iPhone 5c con sus características y especificaciones: incluía más almacenamiento, Touch ID, un procesador más potente (el chip A7), mejor cámara y un diseño premium disponible en diversos colores.
Además, hay que tener un detalle en cuenta. Al lanzar este dispositivo, automáticamente el iPhone 5 fue descatalogado en muchos países. Sin embargo, podía seguir siendo adquirido en tiendas alternativas por una suma bastante menor y, a fin de cuentas, pocas diferencias había con el iPhone 5c. De hecho, al menos el iPhone 5 partía de los 16 GB de almacenamiento, y a fin de cuentas si el procesador era el mismo y encima contaba con un diseño premium, la decisión estaba cantada.
Por otra parte, también era bastante destacado el hecho de que, con el lanzamiento de estos dispositivos, el precio del iPhone 4s bajase considerablemente hasta los 399 euros, aunque en este caso también volvíamos a los 8 GB de almacenamiento. Sin embargo, este fue el iPhone que se situó como la opción económica frente al iPhone 5s, mientras que el iPhone 5c se quedó marcado como el peor iPhone de la historia, algo probablemente relacionado con el precio del mismo y las características que incorporaba.
Años más tarde la historia se repitió de otra forma… ¡Y funcionó!
Tras el fiasco del iPhone 5c, durante algunos años Apple siguió su estrategia de forma cautelosa, lanzando solo dos terminales por año (el estándar y la correspondiente versión Plus a partir del iPhone 6). Sin embargo, tras el lanzamiento del iPhone X junto a los iPhone 8 en el 2017, las estrategias de Apple cambiaron algo más.
Allá por el 2018, junto al lanzamiento de los iPhone Xs y iPhone Xs Max, desde Apple dieron también el paso de retomar la estrategia de los iPhone 5c y iPhone 5s, y así fue como vimos un nuevo dispositivo de lo más interesante: el iPhone Xr.
Este dispositivo, si bien tampoco era tan económico, era una versión algo inferior del iPhone Xs que se limitaba en algunas características, tales como una tecnología inferior en cuanto a la pantalla o bien que solo incluía un sensor para la cámara. A pesar de ello, Apple optó por incluir características nuevas como el chip A12 Bionic que también estaba presente en los iPhone Xs, y a grandes rasgos podría decirse que al iPhone XR no le faltaba nada.
Tenía también el nuevo diseño sin botón inicio de los iPhone, e incluso estaba disponible en multitud de colores como en su día hizo el iPhone 5c. Sin embargo, a diferencia de este otro dispositivo, el iPhone Xr fue un éxito en ventas, y de hecho fue el smartphone más vendido del año 2019 y durante gran parte del año 2020. Es más, probablemente siga vendiéndose bien durante algo más de tiempo, pues sigue siendo una opción a tener en cuenta.
Así, si bien es cierto que el iPhone 5c fue un fracaso y que, por tanto, puede ser considerado perfectamente como el peor iPhone de la historia en cuanto a especificaciones y ventas, lo cierto es que el concepto no era del todo malo: falló la ejecución y el precio del mismo, y prueba de ello ha sido el iPhone Xr.